Entre los portales 50 y 54 de la calle González Cuadrado de Sevilla se esconde un jardín olvidado. Una puerta de metal repleta de grafitis bloquea la entrada e impide ver los árboles frutales de su interior.
Entre los portales 50 y 54 de la calle González Cuadrado de Sevilla se esconde un jardín olvidado. Una puerta de metal repleta de grafitis bloquea la entrada e impide ver los árboles frutales de su interior.